José de Cádiz
Una
luz que ilumina es tu sonrisa
Esa
brisa que envuelve tu nobleza
Tu
carisma y ternura me seducen
Tu
bondad magnetismo y fortaleza
¡Sonríes,
siempre sonríes! Porque eres dichosa
De
seguro en el mundo nadie es más feliz
que tú
Amas
la vida, a las estrellas, a todo lo que rodea
Los
niños han sido siempre tu centro de atención
Cuando te conocí me obsequiaste una sonrisa
¿Puede
alguien sonreír sin conocerme? Me dije
Al
instante comprendí que era un regalo de tu nobleza
Sin
duda con esa sonrisa puedes conquistar el planeta
Doy
gracias a Dios y al destino por haberte conocido
Diariamente
y con mil detalles me dices que me amas
Puedes
estar segura que eres muy bien correspondida
Te
elegí como compañera para vivir siempre a tu lado
Obviamente en una vida anterior ya nos conocíamos
Obviamente en una vida anterior ya nos conocíamos
Hemos
sido amigos y esposos por toda la eternidad
Por
eso la identificación profunda de nuestras almas
A
ello se debe la espiritualidad que nos caracteriza
En
la intimidad contigo toco las puertas del cielo
Reposando
en el campo me siento en el paraíso
Aves y murmullo del viento cantan una sinfonía
La
fuente de agua viva que brota observa curiosa
No tengas la menor duda que vives en mi pensamiento
Cuando
se ama de verdad no hay ojos para nadie más
Mis
sentimientos y emociones te pertenecen completos
Sigue sonriendo dichosa en cada instante de tu vida.
Para
María Silvia Andraca Cruz
No hay comentarios.:
Publicar un comentario